Highlights Medio Maratón Veracruz 29-01-2007
Los corredores de Jersey Rojo que "amablemente" me cortaron el aire del 5 al 10k
"¡Venga jóven ya casí llega!"
Lo que parecia ser un reto complicado por la distancia y temperatura, terminó definiendose por un solo factor: el viento.
Ya lo había advertido el Tiburón: "Cuidado con el viento". La verdad es que uno no sabe la dimensión de un factor climatológico hasta que no lo vive en carne propia. Ahora sé que subidas de 500 metros con inclinación moderada se convierten en tramos del doble del largo con el viento pegando de frente.
Y es que el viento proveniente del mar (y que se hacía mas fuerte cuando nos acercabamos a la costera) estaba cargado de humedad y arena de mar que se fijaba a la piel humedecida con el sudor, lo que hacía incomodísimo correr.
Estaba sudando mucho y perdiendo velocidad, así que la estrategia fue hidratarme en cada punto de abastecimiento y correr remolcado detrás de un club de corredores de Jersey Rojo para cortar el embate del viento, así lo hice desde el kilómetro 5 hasta cerca del 9, en donde los perdí por amarrarme las cintas de mis tenis.
Ya lo había advertido el Tiburón: "Cuidado con el viento". La verdad es que uno no sabe la dimensión de un factor climatológico hasta que no lo vive en carne propia. Ahora sé que subidas de 500 metros con inclinación moderada se convierten en tramos del doble del largo con el viento pegando de frente.
Y es que el viento proveniente del mar (y que se hacía mas fuerte cuando nos acercabamos a la costera) estaba cargado de humedad y arena de mar que se fijaba a la piel humedecida con el sudor, lo que hacía incomodísimo correr.
Estaba sudando mucho y perdiendo velocidad, así que la estrategia fue hidratarme en cada punto de abastecimiento y correr remolcado detrás de un club de corredores de Jersey Rojo para cortar el embate del viento, así lo hice desde el kilómetro 5 hasta cerca del 9, en donde los perdí por amarrarme las cintas de mis tenis.
Los corredores de Jersey Rojo que "amablemente" me cortaron el aire del 5 al 10k
A partir de ahí vine a menos en ritmo y fuerza, el viento literalmente hacía que corrieramos con el doble de esfuerzo, el cuerpo pesaba mas al tratar de romper el aire y avanzabamos muy lentos aun cuando imprimiamos la misma fuerza y velocidad a la zancada.
Después del punto de monitoreo del Chip, en el kilómetro 10 comenzó mi peor momento, el viento daba tregua por algunos momentos pero volvía del mar con mas fuerza y pegando por el flanco izquierdo. Atacaba tan fuerte que podía sacar a uno de balance, por si fuera poco, al pasar por algunos terrenos valdios o playas públicas el aire levantaba nubarrones de arena que había que cruzar con los ojos cerrados para que no se metiera en las pupilas. Con el viento en contra, las rodillas y la planta del pie derecho adolorido pensé en caminar un rato y recuperar el aliento.
Pensé que si caminaba, terminaría parándome y así sería mucho mas difícil retomar mi paso, así que decidí seguir moviendo las piernas y rodar mas lento hasta el kilómetro 15, justo pasando el Acuario.
No sé porque, pero al dar vuelta en U sobre la costera me motivé pensando que el recorrido ya iba rumbo al estadio, así que de a poco pude retomar el ritmo que traía hasta el kilómetro 5 y ya con el viento pegando en la espalda, impulsandome hacia adelante pude rebasar a varios corredores que para el kilómetro 17 ya iban caminando.
Después del punto de monitoreo del Chip, en el kilómetro 10 comenzó mi peor momento, el viento daba tregua por algunos momentos pero volvía del mar con mas fuerza y pegando por el flanco izquierdo. Atacaba tan fuerte que podía sacar a uno de balance, por si fuera poco, al pasar por algunos terrenos valdios o playas públicas el aire levantaba nubarrones de arena que había que cruzar con los ojos cerrados para que no se metiera en las pupilas. Con el viento en contra, las rodillas y la planta del pie derecho adolorido pensé en caminar un rato y recuperar el aliento.
Pensé que si caminaba, terminaría parándome y así sería mucho mas difícil retomar mi paso, así que decidí seguir moviendo las piernas y rodar mas lento hasta el kilómetro 15, justo pasando el Acuario.
No sé porque, pero al dar vuelta en U sobre la costera me motivé pensando que el recorrido ya iba rumbo al estadio, así que de a poco pude retomar el ritmo que traía hasta el kilómetro 5 y ya con el viento pegando en la espalda, impulsandome hacia adelante pude rebasar a varios corredores que para el kilómetro 17 ya iban caminando.
La verdad es que cuando estoy cansado los kilómetros se me empiezan a hacer larguísimos y del K 16 al 19 me pareció una eternidad, por si fuera poco, entre los corredores rezagados y los que mantuvieron el paso, los grupos comenzaron a fragmentarse y de un momento a otro me quedé flotando entre unos cuantos corredores dispersos (foto), lo cuál no estubo mal, pues las porrras y animos de las personas en el camellón comenzaron a llegarme con dedicatoria personal:
"¡Venga jóven ya casí llega!"
Aún así logré alcanzar el km 20 con reservas de Oxígeno que quemé al ver el estadio de la U. Veracruzana cerca y mi réloj debajo de las 2 horas, así que hice mi entrada triunfal al estadio volando (al menos así me sentía) y registrando 1"59"19 seg.
Al terminar la carrera volvi a a encontrarme con el buen "Tiburón" Raul Yepez, a quién finalmente pude conocer en persona después de un buen tiempo blogueano y años de contacto indirecto con algunos amigos. Me dió gusto contactar a Raúl, quien indirectamente ha sido uno de los principales motivadores para que yo esté corriendo y muchos blogueando. La foto quedó como promesa de una posible visita del Tiburón a tierras chilangas.
No pudimos correr juntos, pero al menos no se nos escapó la obligada foto del recuerdo con nuestras bien merecidas medallas. Hay varios 10k programados para los próximo meses que podremos (ahora si) correr juntos.
¿Y después de Veracruz qué sigue? Por lo pronto unos días de vacaciones a mis rodillas y los 10k de MVS en Febrero 25 (posiblemente en compañía de una bloguera muy popular).
Todavía estoy muy lejos, pero hay ganas y a lo mejor tiempo y rodillas para acortar el reto de dos a una palabra: Maratón
Al terminar la carrera volvi a a encontrarme con el buen "Tiburón" Raul Yepez, a quién finalmente pude conocer en persona después de un buen tiempo blogueano y años de contacto indirecto con algunos amigos. Me dió gusto contactar a Raúl, quien indirectamente ha sido uno de los principales motivadores para que yo esté corriendo y muchos blogueando. La foto quedó como promesa de una posible visita del Tiburón a tierras chilangas.
No pudimos correr juntos, pero al menos no se nos escapó la obligada foto del recuerdo con nuestras bien merecidas medallas. Hay varios 10k programados para los próximo meses que podremos (ahora si) correr juntos.
¿Y después de Veracruz qué sigue? Por lo pronto unos días de vacaciones a mis rodillas y los 10k de MVS en Febrero 25 (posiblemente en compañía de una bloguera muy popular).
Todavía estoy muy lejos, pero hay ganas y a lo mejor tiempo y rodillas para acortar el reto de dos a una palabra: Maratón
Labels: Blog Runner
ME SIENTO COMO MAMÀ... BIEN ORGULLOSA DE USTE CHAMACO!!!
FELICIDADES!!! BIEN HECHO....
QUE PASO CON GINA? ajajajajaajajajjajaaj
APLAUSOS, EL MARATONS SERÀ PIECE OF CAKE PARA TI!!!