Los tiempos en el 10k van como la canción: " de reversa mami, de reversaaa..."

Lejos ha quedado aquel glorioso 51:49 que logré en la carrera Imagen de Marzo pasado. La verdad es que luego de esa marca pensé que estaría muy cerca de rebasar la barrera de los 50 minutos, pero ¡puras mermas! primero el 52:09 en el 10k de Reebok, y hoy un 52:29 en la Rock & Run.

La carrera Rock & Run es organizada por una de las contadas promociones independientes que aún sobreviven en la ciudad. Como su nombre lo dice, la competencia está amenizada por un cotorro grupo de covers de Rock en inglés lo suficientemente bueno para salvarse de los abucheos de algún "entendido" vociferando: "A ver a que hora empiezan a tocar cabrones!"

Y es que el ambiente familiar que caracteriza a las carreras es bastante alivianado, ya que además del clásico 10k también hubo 5k y categorías infantiles que compensaron en ambiente cualquier carencia en organización.

Ni hablar, me quemé la Rock & Run en favor del medio maratón de la semana que entra. Y es que hize lo que nunca; el sábado una tirada de 20 kilómetros para trabajar resistencia, además de un 10k ligero el viernes.

El sobreentrenamiento terminó por quitarme stamina, pero por suerte, mi sobrina sacó la casta por la familia Escobar.

Aunque apenas fue su segunda carrera en la categoría de "hasta 4 años", la Meli corrió como las grandes.

Casi se lleva de punta a punta los 100 metros de competencia, y aunque en los ultimos metros fue rebasada, ver a Melisa liderear la carrera y subir al podio en tercer lugar fue una grata sorpresa.