Escribo estas líneas mientras escucho por primera vez el nuevo disco de Earlimart; el grupo que más intensamente me ha provocado en el último año.

Earlimart es un dúo californiano formado por Aaron Espinoza y Adriana Murray que hace música pop de primera línea. Si, es pop, pero pop fino, de calidad, de ese que pone la piel de gallina y que cala hasta los huesos como un dolor en la rodilla que se aparece cuando ya lo habíamos olvidado para recordarnos tiempos pasados, para añorar lo que se tuvo, para revalorar lo que se tiene y para liberar a ese invisible animal de la nostalgia y la añoranza.


La canción que suena ahora se llama "Before it gets better", es la primera vez que la escucho, y antes de analizar la letra a detalle, prefiero dejarme afectar por los acordes y la voz de Adriana Murray -que dicho sea de paso- canta como los mismísimos ángeles.


Las Instrumentaciones de violines, pianos y reverberaciones corales detacan a lo largo de tracks como "Time for Yourself" o "For the birds", que brillan como gemas gracias a la dulzura vocal de Murray. Aunque es justo decir que Aaron Espinoza se luce en temas como "Cigarettes & Kerosene", en los que libera de su guitarra eléctrica ese feeling tan especial, que al menos a mi, me provoca de forma física.



"Hymn and Her" es música atemporal, un álbum lleno de postales sonoras que cuentan historias alejadas del lugar común y la figura poética, una bomba musical que dispara esquirlas emocionales en torno al escucha, y con la que es imposible que alguien con un gramo de sensibilidad se salve de ser impactado por la belleza de sus temas.

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